Por Fabio Moreno Arroyo y Dalliana Asprilla González.

Desde las verdes y esposos bosques del municipio de Tadó, Chocó, emerge una voz que ha sabido conectar con miles de corazones en Colombia y más allá, no con discursos elaborados ni grandes producciones, sino con lo esencial: el machete en la mano, la tierra bajo los pies y el alma conectada con la raíz. Es Jesús Jair Mosquera, más conocido en redes sociales como Jair desde el Campo, un joven campesino que ha convertido su cotidianidad en contenido viral y profundamente significativo.
Con apenas 27 años, Jair se ha posicionado como uno de los creadores de contenido más auténticos del país, gracias a sus videos donde documenta con sencillez y alegría la vida rural en el corazón del Chocó. Ya sea sembrando, pescando, cocinando con leña o simplemente contando anécdotas entre cultivos, Jair transmite un mensaje poderoso: el campo no es atraso, es sabiduría; no es olvido, es origen.
Lo que para muchos podría ser rutina, para Jair es poesía visual. Con un carismático “Hola, hola, volví; nuevo video” y una sonrisa genuina, muestra cómo se hace una sopa de pescado al aire libre, cómo se cava una huerta o cómo se celebra la vida en comunidad. Sus publicaciones, que superan las miles de vistas en TikTok y Facebook, no solo entretienen, sino que educan, promueven el orgullo por lo afro y revalorizan los saberes ancestrales del Pacífico.